La mejor manera de estar preparado para lo inesperado es tener capacidad física.
Sea lo que sea que tengamos en frente, disfrutar una larga caminata, tener que levantar algo pesado o alguna enfermedad, tu cuerpo se enfrentará a lo inesperado.
Si algo pasa, y tienes la capacidad física vas a estar bien.
Si algo inesperado pasa y no tienes la capacidad física, te vas a preguntar por qué no resultó bien.
Y la verdad es que todos sabemos que algo inesperado pasará pero aún así no lo esperamos. Pero cuando lo esperas, las rejas se abren. Podrás responder según la demanda y tal vez te sorprenda para bien el resultado.
Entrena tu cuerpo.
-Pável Sáenz