Si interrumpiste tu entrenamiento, no dejes que te saque de ritmo.
Interrumpiste tu constancia. Está bien.
Lo que no está bien, es tirar la toalla porque fallaste. Eso va a afectar tu capacidad física y mental, y no me gustaría que eso te pasara.
Aquí un ejemplo de que no importa la edad que tengas, o los tiempos disponibles, o tus habilidades, hay que seguir. Tu cuerpo te lo agradecerá.
Guillermo, Elena, Alex, Margarita y Rodrigo son un ejemplo de ello.
-Pável Sáenz